Vivir Mejor en Casa apuesta por la innovación social

Para prevenir la institucionalización contribuimos a la mejora del servicio de ayuda a domicilio integrado y centrado en la persona

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Para retornar a casa construimos junto con la persona un plan de apoyos seguro, personalizado y sostenible acompañando en el proceso

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Proporcionamos una formación especializada a las personas cuidadoras no profesionales que facilite las tareas de cuidado y promueva la autonomía y el desarrollo personal, generando bienestar y contribuyendo a una reducción de la sobrecarga.
Además, buscamos mejorar el modelo de ayuda a domicilio a personas en situación de dependencia, incrementando las horas de atención y transformando el equipo de cuidados para retardar o evitar el ingreso en un entorno institucional. x
Ofrecemos a las personas que viven en residencias y que tienen voluntad de continuar su vida en la comunidad, opciones de alojamiento alternativos a la residencia con un plan de apoyos adecuado, pactado y seguro. x
EL PROYECTO
Mejorar la calidad de vida de las personas mayores en situación de dependencia en el entorno domiciliario
Vivir Mejor en Casa se enmarca en la línea estratégica de desinstitucionalización, incluida en el componente 22 “Plan de Choque para la Economía de los Cuidados y Refuerzo de las políticas de igualdad e Inclusión” del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, entendida como una potenciación de los modelos comunitarios y domiciliarios de los cuidados de larga duración a personas mayores con dependencia.
Vivir Mejor en Casa tiene en cuenta a las personas con deterioro cognitivo y demencia
  • El proyecto intenta ofrecer a las personas seguir en su casa, con su familia y en la comunidad.
  • Promueve, adapta y facilita un entorno amigable para las personas con demencia.
  • En ambos componentes (Navarra y Cataluña) personas voluntarias dan apoyo y soporte a las personas participantes y sus familias.
  • El eje de todas las intervenciones es el respeto a las personas que participan en el estudio, con o sin demencia, y la garantía de derechos para las personas mayores con dependencia.
  • Todas las herramientas de evaluación están adaptadas a personas con dependencia, con o sin demencia.
  • Las personas cuidadoras reciben una formación especializada para acompañar a personas que viven con demencia.
  • Equipo interdisciplinar y gestión de casos en los dos componentes.
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